sábado, 20 de junio de 2015

Un lugar

-Un día precioso ¿no crees?- pronunció aquellas palabras sin dirigirlas a nadie en concreto. Él giró la cabeza en su dirección y contempló su perfil recortado por la claridad de la tarde.
-Supongo que sí.- acertó a decir unos segundos después. Ella esbozó una sonrisa a la nada y se tumbó en el césped, él la imitó.
Trascurrió bastante tiempo hasta que él se digno a romper el hermoso silencio que se había creado entre ambos.
-¿Por qué siempre este lugar?
-¿Por qué no?- contestó manteniendo los ojos cerrados, saboreando los dulces rayos de sol que acariciaban su piel.
-Esa respuesta no me convence- Se incorporó.
Ella abrió los ojos y lo miró con sus intensos ojos negros.
-Porque quiero que este sitio sea nuestro, estuve mucho tiempo viniendo aquí solo para encontrarte y cuando por fin lo conseguí me dije que este sería el sitio perfecto donde estar contigo.

Él no pudo evitar sonreír abiertamente, con dulzura se acercó a sus labios y los besó con ganas.